viernes, 11 de febrero de 2011







ESTOY bajo tu dependencia
ligada a tu olor,
tengo el alma perdida
y la mente usurpada.
Necesito tus besos
y tu lengua volcánica.
Dependencia egoísta
partida a partes iguales por temores,
amor excesivo,
incluso, en daño de los dos.
El amor es una montaña rusa
que bascula por tus piernas,
Llámame: puta.
Amor, llámame: puta mía.






Noemí Trujillo Giacomelli (Barcelona, 1976)


1 comentario:

  1. El amor es una montaña rusa, cierto, y todos rezamos porque los coches se paren en lo alto del todo para ver mejor el panorama, para sentir más tiempo la emoción y el vértigo....puta, zorra, criada, esclavo, perro....unas deliciosas palabras que recoges, sumiso.

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